Romanticismo en la Regencia: vive tu fantasía “Bridgerton” en estos destinos británicos

¿Te has pegado un atracón con la primera temporada de "Bridgerton" y no puedes esperar a la segunda? Descubre estos lugares para volver a vivir la serie, esta vez en persona

by Shandana A. Durrani

Queridos lectores: al igual que muchos aficionados al romance histórico, no podía esperar al estreno de “Bridgerton” y ver su primera temporada. Aunque no soy una gran fan de las novelas de Julia Quinn, sí que disfruté con ciertos personajes (¡me refiero a vosotros, Kate y Penélope!) y sus ingeniosas réplicas. La primera temporada me la tragué en un solo día, de lo más entretenido, durante las Navidades de 2020, aquella época en que mi sofá de terciopelo azul era el lugar más lejano y exótico al que podía viajar, debido a las restricciones por COVID.

Un año después, la expectación que se cuece por la segunda temporada de “Bridgerton” es máxima. Al igual que en la serie de libros, la segunda temporada se centra en Lord Anthony Bridgerton, el hijo mayor del clan, y en su enemiga, convertida en amante, Kate Sharma (de apellido Sheffield antes de ser desposada). La primera temporada estaba impregnada de colores pastel, espléndidos vestidos, prendas hechas a mano en la India y erotismo gráfico. Aunque yo personalmente hubiese preferido que llevasen a la pequeña pantalla los libros de la serie “Slightly”, de Mary Balogh, que tienen un tono más cordial y sentido (¿quién no es capaz de adorar al honorable Wulfric, el duque de Bewcastle?), he de admitir que disfruté de la diversa naturaleza que la productora Shondaland aporta a su particular narración de los libros de “Bridgerton”.

Mientras esperamos la llegada de la segunda temporada, querido lector, puedes hacer realidad tu fantasía de “Bridgerton” en estos románticos lugares británicos, algunos de los cuales fueron localizaciones para el rodaje de la serie, así como de otros dramas que tienen lugar en la época de la Regencia, incluyendo la laureada adaptación de la BBC de 1995 de “Orgullo y Prejuicio”.


Los romances de la Regencia suelen estar ambientados en Londres, con las mansiones de Mayfair como escenario principal. Durante la época napoleónica, Mayfair albergaba a las altas esferas de la sociedad (casi el 70 % de sus primeros inquilinos tenían algún título nobiliario), lejos de los barrios bajos de St. Giles y Whitechapel. Hoy en día, Mayfair sigue siendo una dirección de lujo con el verdor de Hyde Park a un lado y Grosvenor Square en el centro (y, vaya por donde, St. Giles y Whitechapel se han convertido también en códigos postales muy codiciados).

Londres

Aunque ya no se celebran aquellos esplendorosos bailes de la alta sociedad, los visitantes aún pueden esperar encontrarse con aristócratas paseando por las calles con sus mejores galas. Dirígete a Grosvenor Square, el segundo mayor oasis ajardinado de Londres, que data de 1726. El arquitecto paisajista John Alston creó este espacio verde para la nobleza terrateniente, que añoraba sus fincas campestres cuando la temporada estaba en todo su esplendor. 


Si bien Londres es el escenario principal en la mayoría de las historias durante la Regencia, Bath suele ser el siguiente escenario en importancia, ya que fue un popular retiro de salud y bienestar para los ancianos y los enfermos durante la época del Príncipe Regente.

Bath

La icónica Royal Crescent, una hilera curva de 30 casas adosadas de estilo palladiano, construida por John Wood en 1774, sirvió para hacer de mansión campestre de los Featherington en la serie. Por su parte, los famosos Assembly Rooms de Bath (aunque incomparables al club Almack’s) funcionaron bien como mansión de los Danbury. Hoy en día, el número 1 de Royal Crescent es un museo propiedad del Bath Preservation Trust donde se puede ver cómo vivían los residentes durante la época georgiana, y el número 15 es el Royal Crescent Hotel, el lugar idóneo para reposar y pensar en la vieja Inglaterra. 

A una hora al sur de Bath se encuentra la ciudad de Salisbury, famosa por su catedral, escenario de la firma de la Carta Magna en 1215. Pero es en Wilton House, hogar de los Condes de Pembroke desde el siglo XVI, donde se han ambientado muchas de las adaptaciones modernas de novela histórica. La residencia apareció en “Sentido y sensibilidad” de 1995, “Orgullo y prejuicio” de 2004, la segunda temporada de “Outlander”, “Emma” de 2019 y en cinco temporadas de “The Crown”. 

Salisbury

En “Bridgerton”, el exterior de Wilton House se utilizó para simular tanto Hyde Park como la Catedral de Saint George, ambos situados en Londres, y sus interiores sirvieron para representar la Hastings House y el Clivedon Castle, entre otros. Los huéspedes pueden visitar la finca a partir de Semana Santa, con acceso a interiores como la galería de retratos con pinturas de Van Dyke y Rubens, los camarotes del siglo XVII, así como los terrenos, que comprenden casi 6.000 hectáreas de
tierra resplandeciente.

“Bridgerton” no es el primer romance de la regencia que deleita a los lectores. La corona la ostentaría “Orgullo y Prejuicio”, el emblemático tomo de Jane Austen que versa sobre el amor, el matrimonio y el dinero, durante las Guerras Peninsulares. Aunque muchos debatirán sobre cuál es la mejor versión cinematográfica del libro (mi voto es para la adaptación de Jennifer Ehle y Colin Firth), pocos discuten la importancia de Pemberley en el cambio de rumbo de la prejuiciosa Elizabeth Bennet hacia el orgulloso Sr. Darcy. 

Austen describe la finca como “un edificio de piedra grande y hermoso, que se levanta sobre un terreno elevado y está respaldado por una cresta de altas colinas boscosas… Sus orillas no eran formales ni estaban falsamente adornadas”. Por su parte la finca de Lyme Park, al sur de Disley, podría claramente describirse con las mismas palabras. Y es que esta mansión isabelina, gestionada por el National Trust del Reino Unido, hizo las veces de la extensa y ornamentada Pemberley en la adaptación de 1995.

Disley

Con unos terrenos que embaucan y deleitan, y unos interiores, como el Dormitorio del Caballero, que presumen de sus pasadizos secretos, Lyme es uno de los favoritos para los fanáticos de la Regencia. Recorre la extensa finca y tómate el té de las cinco en la Salting Room. No olvides ataviarte con tu tocado favorito mientras saboreas deliciosos pastelillos y esperas la llegada de tu Duque de Hastings.