Autobús de Palencia con Alsa

Buses a Palencia

Palencia es una ciudad castellana que combina arte, naturaleza, gastronomía y buen ambiente con interesantes opciones de turismo activo, relajación, rutas enológicas y un ambiente encantador. La estación de autobuses de Palencia se localiza en un emplazamiento muy céntrico, cerca del parque los Jardinillos de la Estación y a solo 5 minutos andando de la estación de trenes. Está dotada con un buen nivel de servicios y cuenta con una buena valoración por parte de sus usuarios.

¿Cuál es la principal estación de autobús en Palencia?

A 10 minutos andando de la plaza Mayor se encuentra la estación a la que llegan la mayoría de los autobuses a Palencia. Es un gran edificio dotado con sala de espera, venta de billetes, buena accesibilidad para personas con dificultades de movilidad, información a viajeros, máquinas expendedoras y cafetería. En las inmediaciones de la estación de autobuses de Palencia también hay aparcamiento y farmacia-ortopedia.

¿Qué compañías de autobuses ofrecen rutas a Palencia?

Alsa es la compañía más presente y popular en los viajes de autobuses a Palencia desde las distintas ciudades de España, en especial Madrid, Valladolid, Salamanca y Zaragoza, entre otras. Se trata de una empresa muy solvente, con gran experiencia y una flota de vehículos modernos, eficientes y plenos de servicios, muchos de los cuales incluyen cuarto de baño y entretenimiento individualizado por asientos.

¿Por qué viajar en autobús a Palencia?

No compensa desplazarse en coche o tren hasta esta ciudad cuando los autobuses a Palencia realizan esta ruta con gran frecuencia y un servicio impecable. Desde Madrid, es posible elegir entre 5 horarios diferentes, entre las 9 y las 21 horas, y el recorrido solo tarda unas 3 horas. Asimismo, es posible viajar desde Salamanca en solo 2 horas y media.

Antes de viajar a Palencia en autobús es bueno saber...

Además del patrimonio monumental que la caracteriza, Palencia proporciona entretenimientos turísticos alternativos como el Canal de Castilla, una obra de ingeniería hidráulica reconvertida en ruta turística entre esta provincia y la de Valladolid. Los amantes del enoturismo encuentran en su entorno un atractivo y delicioso conjunto de bodegas, viñedos y catas vinícolas. La gastronomía palentina es sabrosa y contundente, con platos como el asado de cordero churro palentino, los cangrejos de Herrera de Pisuerga y la panceta asada. Finalmente, el transporte público de la ciudad funciona bastante bien, de hecho la línea principal 1 tiene parada en la estación.

Para viajar a Palencia, lo mejor es optar por algunos de los autobuses que Alsa, Avanzabus o Grupo Damas ofrecen. En la Plaza Jardinilllos de la Estación se alza la terminal interregional de autocares de Palencia. Las compañías que trabajan en ella ofrecen alternativas para viajar a cualquier punto del país. Se puede ir de Palencia a Barcelona, Madrid, Sevilla, Málaga o también desplazarse a puntos cercanos como Valladolid o Burgos y disfrutar a la vez de un trayecto cómodo y tranquilo.

En la estación de autobuses realizan parada las líneas de bus urbano P y A de Alsa City. También es posible moverse por toda la región en taxi, ya que en la puerta de la estación trabajan varias compañías. El centro de la ciudad está a escasos metros, por lo que también se puede llegar hasta él andando.

Palencia

Palencia es un municipio español ubicado en la llanura de Tierra de Campos, en Castilla y León. Actualmente cuenta con una densidad de población de 82.000 habitantes, repartidos en una extensión de casi 100 kilómetros cuadrados. Aunque la historia de Palencia siempre la ha descrito como una ciudad comercial con una alta actividad en la ganadería y en la agricultura, su evolución la ha convertido en una región muy importante en el sector industrial.

El patrimonio de Palencia se encuentra dividido entre elementos arquitectónicos de carácter religioso y obras civiles, como es el caso de su Ayuntamiento, del Palacio de la Diputación o de su Calle Mayor. La Semana Santa en Palencia se vive intensamente, al igual que la Romería, en donde se reúnen casi todos los habitantes para disfrutar de una tradición histórica.